La Asociación Nacional de Fotógrafos para este dispositivo móvil de Apple, integrado por varios alicantinos, defiende esta nueva forma de expresión artística.
FOTO: GABRIEL SAMPER (@kainxs).
La cuestión está abierta a miles de interpretaciones, pero un hecho está claro: las nuevas tecnologías han terminado por complicar el debate, puesto que los móviles de última generación, por ejemplo, han abierto nuevas posibilidades para el arte.
De este modo, la fotografía es otro de los elementos que más han evolucionado en los últimos años. Concretamente, las imágenes tomadas con los propios teléfonos móviles. Y de ahí que se haya producido el nacimiento de nuevas y distintas vertientes creativas, que apuestan y defienden lo suyo como una nueva forma de expresión artística. Pero... ¿Qué es arte? ¿Quién establece lo que es o no arte? Por esos derroteros anda el viejo debate.
La Asociación de Fotógrafos iPhone de España se mueve precisamente en este nuevo campo de la fotografía, los móviles y las nuevas tecnologías. El colectivo, integrado por varios alicantinos entre los fundadores, asegura que esta toma de fotografías con su "smarthphone" es una "nueva iniciativa artística, un nuevo arte, que está golpeando muy fuerte en todo el mundo".
Las palabras son del alicantino Gabriel Samper, quien justifica además esta nueva opción por sus múltiples ventajas ante la cámara tradicional. "Tiene una inmediatez que no te la dan las otras cámaras, y puedes hacer una fotografía, por ejemplo, en cualquier momento, ya sea en la calle, en el metro o en otro lugar", afirma.
Respecto a la formación, Samper señala que este estilo fotográfico no requiere de un gran aprendizaje y, en todo caso, sí debe uno estar atento a las nuevas actualizaciones y aplicaciones por Internet. "En la red se pueden encontrar muchos vídeos con tutoriales vía Youtube, y aunque cada uno tiene su aplicación favorita, es necesario estar atento a las actualizaciones", agrega.
Marien Limiñana, otra integrante alicantina del colectivo "iPhonetografos" -si se permite la expresión-, descarta totalmente que esta práctica sea una moda efímera y argumenta su consolidación apoyándose en la red Instagram, que cuenta a raiz de este fenómeno con millones de usuarios en todo el mundo.
"No se trata de competir con un fotógrafo profesional o con un estudio de similares características. Y no quiero entrar tampoco en esas disputas de cuáles son las mejores fotos. Esta es una nueva forma artística, que es una imagen realizada a través de un dispositivo móvil. Y esta imagen es tan válida como cualquier otra, dentro del mensaje que quiero transmitir", explica.
¿CRÍTICAS?
Por su parte, el presidente de Afali-Lucentum, José Carlos Robles, señaló sobre este movimiento que "como medio de expresión artística me parece tan válido como cualquier otro. Sin embargo, es incuestionable que ofrece limitaciones técnicas, por tanto en ese terreno siempre estará por debajo de sectores más competitivos y con equipos más caros y sofisticados".
Robles, que está al frente de una de las asociaciones más fuertes en la provincia en temas fotográficos, recalcó la total legitimidad de los "iPhonetografos" ("iPhonografía", la definen otros) aunque volvió a insistir en sus carencias técnicas:
"Las limitaciones técnicas condicionan las posibilidades del fotógrafo que debe hacer un esfuerzo por suplir esas carencias. Con todo, cuando este sistema está en manos de gente con talento, no me cabe duda de que se pueden alcanzar buenos resultados, especialmente en frescura, espontaneidad y foto casual o "street photography". En otras disciplinas; naturaleza, paisaje, alta velocidad, nocturnaÉ dudo mucho que se puedan alcanzar grandes cosas".
"Además, he observado que los fotógrafos de iPhone utilizan mucho los programas de edición, quizás para paliar o enmascarar carencias o resultados más pobres", concluye.
Algunas galerías de Madrid ya dedican exposiciones exclusivas para fotografías hechas con el iPhone. En Orihuela, no hace mucho, también se repitió esta actividad.
FOTOGRAFÍA RETRO
La cámara Polaroid es uno de los iconos del siglo XX. Y la revolución digital parecía haber firmado su sentencia definitiva de muerte. Sin embargo, desde hace ya unos años, son numerosos los colectivos y personas que han librado una batalla personal para volver a poner en curso las cámaras Polaroid. Y, desde entonces, se ha desatado una fiebre por la fotografía retro, por la recuperación y el rescate de la clásica imagen Polaroid.
Son, en definitiva, nuevas formas de arte. Vertientes innovadoras, caminos experimentales, pequeñas o grandes vanguardias.¿Quién se atreve a decir ahora qué es o qué no es arte? ¿Lo son las fotos de Helmut Newton, con sus originales modelos? ¿Y las imágenes del fotógrafo André Kerstez realizadas con su antigua Polaroid en su apartamento de Nueva York? ¿Y las fotos de Gabriel Samper? ¿Es arte, o no es arte?
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